Este miércoles 31 de enero de 2018 · LAMA CHÖPA con Jangchub Pelsang Rimpoché


El Lama Chöpa, tal y como se realiza el ritual en la tradición gelugpa, fue compuesto por el Primer Panchen Lama, Khedrup Gelek Pelsang (1385-1438), discípulo de Lama Tsongkhapa y emanación de Manjushri, el Buda de la Sabiduría.

Pero, ¿en qué consiste?

A lo largo de la sesión, junto con las distintas oraciones, alabanzas, dedicaciones, etc se hace una meditación en la que visualizamos el llamado Campo de Mérito, cuyo elemento principal es un gran árbol, conocido como Árbol de Refugio. Como raíz se visualiza al Buda Sakyamuni, el maestro fundamental, y Lama Tsongkhapa, fundador de la escuela gelugpa, ocupa el espacio central. A partir de él se visualiza cómo las ramas del árbol se multiplican para presentar ocho tipos de seres: Los gurus, yidams (mal llamados deidades), budas, bodisatvas, pratyekabudas (realizadores solitarios), sravakas (oyentes o arhats), dakas y dakinis, y finalmente dharmapalas (protectores). Alrededor de Je Tsongkhapa aparecen otros tres grupos: El linaje de iniciaciones tántricas, el linaje yogacara de Asanga y el linaje madyamaka de Nagarjuna.

En un momento dado de la puja se realiza el tsog (ofrecimiento) a los maestros, desde el lama presente ante nosotros hasta el mismo Buda Sakyamuni, pasando por Lama Tsongkhapa y todos los maestros del linaje.

La labor de los maestros no es otra que ayudarnos a practicar de la mejor manera posible hasta la cesación del sufrimiento de todos los seres sintientes. Por tanto, su labor es idéntica a la del propio Buda. Con la diferencia de que, mientras que nuestros oscurecimientos mentales no nos permiten distinguir ningún buda ante nuestros ojos, los maestros están ahí en carne y hueso, aconsejando, enseñando y guiando nuestra práctica. Esta es la razón por la que en el vehículo Vajrayana el guru es visualizado como más importante incluso que el Buda mismo. Al fin y al cabo, nos sería imposible conocer una sola palabra del Buddhadharma de no ser por nuestros gurus.

Por eso, cuando acudas a una práctica de Lama Chöpa -que dicho sea de paso, es un ritual de gran belleza- es muy beneficioso y causa de una inmensa cantidad de méritos si te presentas con fruta, galletas, frutos secos, snacks varios, bombones, zumos, agua, flores, velitas… Parte de esos ofrecimientos se comparten. Si de lo que te corresponde te sobra algo, puedes llevártelo, comerlo más adelante, compartirlo con otras personas (muy especialmente con personas sin recursos), a animales… ya que estos alimentos tienen la energía generada durante el ritual.

Para asistir y participar en un Lama Chöpa no es necesario haber recibido ninguna iniciación, aunque sí es recomendable.


RECUERDA | Compartir comida y bebida al finalizar ciertas pujas sigue formando parte del ritual. Por favor, sigue concentrado en tu práctica, no te levantes y guarda silencio hasta que el lama lo indique. Si traes ofrecimientos, entrégalos a un responsable antes de empezar y procura disponerlos de forma que no sea necesario recurrir a cuchillo, etc. Si estás en primera fila puedes ofrecerte a repartirlos cuando el maestro lo indique, para que él no tenga que levantarse. Gracias.

¿Qué es el Lama Chöpa?